La pelea entre el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y la agrupación kirchnerista La Cámpora se reaviva ante cualquier chispazo. Esta vez el detonante fue una recorrida de Jorge Ferraresi (intendente de Avellaneda y principal armador kicillofista en la provincia de Buenos Aires) por las villas quilmeñas La Matera y Villa Luján. El desembarco de Ferraresi desencadenó un ataque directo de la intendenta quilmeña, Mayra Mendoza, contra el gobernador.
La jefa comunal quilmeña, una de las principales dirigentes de La Cámpora y muy cercana a Cristina Kirchner, reprendió a Ferraresi pero con mensajes que incluyeron críticas a Kicillof. “Hola @Kicillofok, te cuento que este fin de semana tuvimos en Quilmes la visita de nuestro vecino intendente @jorgeferraresi. Esta vez, estuvo en La Matera y Villa Luján, al estilo notero de @lanacionmas”, señaló la intendenta en el arranque de su réplica en la red social X.
Ferraresi había publicado fotos en la misma red social con su recorrida por los barrios, que coronó con la frase “la esperanza de futuro es junto a @Kicillofok”.
“Es una pena que cuando era ministro de Hábitat y ferviente impulsor de la reelección de Alberto Fernández, no mostrara esta misma preocupación por la situación de los barrios de Quilmes; es más, recuerdo con asombro las excusas con las que nos trababa las obras”, criticó Mendoza. Fernández designó ministro a Ferraresi en noviembre de 2020, en uno de sus intentos por congraciarse con Cristina Kirchner.
La intendenta Mendoza aludió ahora a aquella gestión para atacar tanto a Ferrarise como a Kicillof. “Te voy a hacer llegar algunas de las notas que le envié en su momento, y aprovecho la oportunidad para pedirte nuevamente a vos Axel, como nuestro gobernador, el compromiso para avanzar y que nos ayudes a lograr esto que todavía nos falta”, añadió, en su mensaje al gobernador.
El tono de la carta pública de Mayra Mendoza exhibe la profundidad del enfrentamiento entre Cristina Kirchner y La Cámpora, por un lado, y el gobernador Kicillof y un grupo de intendentes, por el otro.
El enfrentamiento se agravó porque Kicillof no apoyó la postulación de Cristina Kirchner para encabezar el PJ. Eso no impidió que se convirtiera en la jefa del partido. Sin embargo, en el entorno de la expresidenta hay furia contra el gobernador, a quien definen como “ingrato”. Esa misma expresión usó Juan Grabois para acusar al gobernador. “Si Axel (Kicillof) tenía que dar un gesto de autonomía, eligió el peor. Sin creerme con la verdad revelada; cuando vos tuviste un mentor o una mentora y estás, por ahí, un poco más lejos... hay algunas actitudes que son malas, como la ingratitud, el resentimiento, la deslealtad...”, dijo Grabois en aquella oportunidad.
Para el cierre de su mensaje, Mendoza se centró en Kicillof: “En el último tiempo, lamentablemente, coincidimos en muy pocas cosas. En lo único en lo que estamos de acuerdo es que hay muchos barrios del conurbano que siguen necesitando de más y mejores obras. Así como también la necesitan los vecinos de Villa Inflamable (entre otras zonas) en Avellaneda”.
Ferraresi dejó señales políticas, más allá de lo discursivo. En su recorrida, se mostró acompañado por un concejal de Unión por la Patria en Quilmes, a quien atrajo a su redil. Se trata de Ariel Burtoli, un dirigente del sindicato de guardavidas Sugara (es secretario gremial). En Lanús, otro distrito gobernado por La Cámpora (el intendente es Julián Álvarez) en el que Ferraresi tiene también peso, el jefe comunal cuenta con una concejala propia, Belén Berrueco, que rompió la bancada de ediles de UP y armó un monobloque.
En la recorrida por Quilmes, Ferraresi estuvo acompañado también por Marcelo Agüero, cantante del grupo de cumbia santafesina Los Leales, quien milita dentro del peronismo quilmeño y el año pasado se postuló a intendente desde la boleta de Juan Schiaretti. (La política de la cumbia)